La imprenta casi arruina mi boda
Mi boda fue el 28 de Agosto y casi se arruina por culpa de la imprenta donde me hicieron mis invitaciones.
Resulta que una amiga me recomendó hacer mis invitaciones en una imprenta donde ella iba, ahí mismo tienen diseñadores que hacen el trabajo y no pensé que fuera a tener algún problema ya que ellos son expertos en el tema.
Solicité mis invitaciones 2 meses antes de la boda y se tardaron casi un mes para que yo pudiera ver el diseño. Cualquier cambio se tardaba demasiado y ya me estaba poniendo nerviosa ya que ya debía de estar entregando las invitaciones.
La imprenta quedó de mandarme mis invitaciones por paquetería, ya solo quedaban 3 semanas y yo no había entregado nada a mis invitados. El 14 de agosto llegaron las invitaciones y quedé en shock, el diseño no era el mismo que yo había autorizado y algunos datos estaban equivocados. Inmediatamente hice el reclamo y no me daban respuesta para resolver el error, estaba súper enojada porque me habían hecho perder el tiempo con el diseño y la impresión, para que al final saliera todo mal.
Ya quedaban 2 semanas para mi boda y seguía sin invitaciones. Los de la imprenta me decían que me las podían tener listas para el 21 de agosto pero ya era muy tarde, no podía confiar. Así que tuve que aplicar un plan B.
Contraté a una diseñadora que me hiciera el diseño y para que me ayudará a imprimirlas, ya había escuchado que no era tan difícil cortar invitaciones, así que entre las 2 hicimos todo el trabajo, desde el diseño hasta el empaque de la invitación y les puedo garantizar que quedó hermosa. Pudimos darle un toque especial a cada invitación, fue muy divertido y poco estresante porque el poco tiempo que ya quedaba. En 4 días hicimos todo y de mejor calidad. Me di cuenta que me hubiera ahorrado demasiado desde un principio, el estrés de dejar en otras manos lo que tú misma puedes hacer, con mayor dedicación y amor. A todos los invitados les gustaron mucho mis invitaciones.
Mi amiga diseñadora ahora es dueña de una tienda de invitaciones digitales y aparte puedes imprimirlas tú mismo. Solo tienes que llevar a una imprenta el archivo que te llega a tu correo electrónico, haces una prueba de color y si te gusta como sale la impresión puedes pedir la cantidad de impresiones que necesites.
Uno no sabe la capacidad que tiene hasta que se enfrenta a un problema, agradezco un montón toda la información que me otorgó la diseñadora (aka Oh! Yupi Yei) que me ayudó y me enseñó todo lo que podíamos lograr y con poco presupuesto.
Hoy trabajo haciendo invitaciones jajaja no tengo que diseñar nada, solo compro mi invitación en mi tienda favorita (guiño, guiño), solicito mi archivo para imprimir, hago todo con mi impresora y corto las invitaciones.
Mis clientes felices con mi trabajo.
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